NACIONES UNIDAS.- La ONU ha activado por primera vez su Protocolo de Seguridad Planetaria ante la amenaza del asteroide 2024 YR4, que tiene un 1.5 % de probabilidad de impactar contra la Tierra el 22 de diciembre de 2032. La medida fue tomada tras informes de la Agencia Espacial Europea (ESA) y la NASA, que han movilizado sus sistemas de observación para analizar su trayectoria con mayor precisión.
El asteroide, descubierto el 27 de enero, tiene un diámetro estimado de 40 a 90 metros. Aunque su tamaño no representa un riesgo de extinción global, un impacto podría causar destrucción significativa en la zona afectada, similar a la explosión de Tunguska en 1908, que devastó un área equivalente a la isla de Gran Canaria.
Primer protocolo de emergencia espacial en la historia
Los protocolos de la Red Internacional de Alerta de Asteroides (IAWN) y el Grupo Consultivo de Planificación de Misiones Espaciales (SMPAG), ambos respaldados por la ONU, se aplican cuando un objeto supera el 1 % de probabilidad de impacto y mide más de 50 metros. Esta es la primera vez que se activan desde su creación en 2018.
El pasillo de riesgo, en caso de colisión, incluye el océano Pacífico oriental, el norte de Sudamérica, el Atlántico, África, el Mar Arábigo y el sur de Asia. Aunque la probabilidad de impacto sigue siendo baja (98.5 % de que no ocurra), los expertos aseguran que el monitoreo se intensificará hasta abril, cuando el asteroide deje de ser visible.
¿Cómo se enfrentaría la amenaza?
Si en mayo el riesgo de impacto sigue por encima del 1 % y el tamaño del asteroide supera los 50 metros, la ONU y las agencias espaciales podrían considerar medidas de defensa, como la evacuación de zonas vulnerables o incluso la desviación del objeto mediante tecnología de impacto cinético, similar a la misión DART de la NASA, que en 2022 logró modificar la trayectoria del asteroide Dimorphos.
El asteroide tendrá un nuevo acercamiento a la Tierra en diciembre de 2028, momento clave para confirmar su trayectoria definitiva. Mientras tanto, la ONU y las agencias espaciales mantendrán reuniones de emergencia para actualizar la información y definir estrategias ante este inusual escenario de riesgo planetario.