La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), a través de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA), declaró el establecimiento de una Zona de Refugio Pesquero Parcial Temporal en aguas adyacentes al puerto de Chuburná, municipio de Progreso, Yucatán, lo que implica la prohibición de captura de varias especies marinas, entre ellas el pulpo rojo (Octopus maya), durante un periodo de cinco años.
La medida responde a la solicitud presentada por el Comité Náutico de Chuburná, integrado por 450 pescadores de cinco cooperativas y 31 permisionarios, quienes señalaron la alarmante disminución en los volúmenes de captura. Según los datos, entre 2018 y 2022 la pesca de pulpo rojo cayó en un 71%, mientras que la del mero rojo se redujo en un 50% entre 2012 y 2022.
La zona denominada “El Cerrito” abarcará 49.48 kilómetros cuadrados y permanecerá como refugio durante cinco años. Su objetivo principal es recuperar las poblaciones de especies de alto valor comercial como el pulpo rojo, el mero rojo, el negrillo, la langosta espinosa del Caribe y el pepino de mar, además de favorecer la biodiversidad en el ecosistema marino.
De acuerdo con estudios del Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables (IMIPAS), la creación de este refugio es técnicamente viable y permitirá la recuperación paulatina de las especies gracias al efecto de “desbordamiento”, que beneficia tanto al área protegida como a las zonas aledañas.
La declaratoria establece que, aunque se restringe la pesca de especies clave, se mantendrá cierta flexibilidad para que los pescadores continúen con otras actividades, con el propósito de equilibrar la conservación ecológica y el sustento económico de las comunidades pesqueras.
Con este acuerdo, Yucatán se suma a las experiencias internacionales donde la implementación de reservas marinas ha demostrado ser una herramienta efectiva para el incremento de biomasa, tallas de organismos y biodiversidad.