La vi0l3nci4 no da tregua en Tulum. La tarde del domingo, un nuevo episodio s4ngri3$nt0 estremeció al polo turístico mas importante de Quintana Roo: el conductor del taxi con número económico 798 del sindicato “Tiburones del Caribe” fue Ej3%^^cut4^d0 a s4ngr3 frí4 en un camino de terracería cercano a la zona hotelera.
Según versiones extraoficiales, el ruletero identificado como Gilberto habría recibido al menos d0s imp4ct0s de b4l4 en la c4b3z4, presuntamente disp4$%r4d0s por sujetos 4rm%^4d0s que, tras perpetrar el cr1m3n, huyeron sin dejar rastro.
La 3j3cu$%ción ocurrió alrededor de las 5:30 de la tarde, en un área donde, irónicamente, circulan miles de turistas cada día. El sitio fue acordonado tiempo después por elementos de seguridad, quienes, como ha ocurrido en otros casos, arribaron cuando ya todo había pasado.
La noticia vuelve a encender las alarmas sobre el nivel de impunidad y descontrol que se vive en este polo turístico internacional, donde la presencia del cr1m3n 0r4aniz4do parece moverse a sus anchas.
Aunque no hay posicionamiento oficial hasta el momento, habitantes señalan que este tipo de hechos ya no sorprenden, sino que se han vuelto parte de la cotidianidad de un Tulum que clama por respuestas.
Las autoridades locales, encabezadas por el gobierno municipal de Diego Castañon Trejo, enfrentan un escenario cada vez más tenso, donde el mi3do se mezcla con el hartazgo social. Mientras tanto, una familia más queda marcada por la vi0l3nci4.¿Hasta cuándo la s4ngr3 correrá sin consecuencias reales?
