Reino Unido.— Una historia de amor familiar y herencia genética ha tocado el corazón de miles en redes sociales, luego de que Elma Godwin, una joven madre británica de 33 años, compartiera una imagen junto a su hija recién nacida, ambas con un distintivo mechón blanco en el flequillo.
La imagen, que rápidamente se volvió viral, muestra a madre e hija luciendo el mismo rasgo poco común: una franja de cabello completamente blanca que destaca entre su melena oscura. Este fenómeno es causado por una condición genética conocida como poliosis, que se caracteriza por la despigmentación localizada del cabello debido a la ausencia de melanina.
Lejos de representar un problema de salud, en el caso de Elma y su hija se trata de una característica hereditaria sin implicaciones médicas. “Fue un momento mágico”, relató Elma a medios locales. “Cuando vi que tenía el mismo mechón blanco que yo, no pude contener las lágrimas. Era como verme a mí misma cuando nací”.
La imagen ha generado una ola de reacciones emotivas en redes sociales. Usuarios de todo el mundo han elogiado la singular conexión entre madre e hija, calificando el mechón compartido como una “marca de amor” o un “vínculo de sangre visible”.
Este caso ha despertado también la curiosidad sobre la poliosis, una condición rara que, aunque puede estar relacionada con algunos trastornos autoinmunes, genéticos o síndromes como el de Waardenburg, también puede manifestarse sin ningún otro síntoma, como ocurre con la familia Godwin.
Más allá de lo médico, la historia de Elma y su bebé ha servido para recordar cómo la genética puede tejer lazos tan visibles como entrañables, uniendo generaciones con pequeños detalles que se vuelven símbolos de identidad, orgullo y ternura.