Brasil. — En un emotivo acto que sigue dando esperanza en la humanidad, una madre con discapacidad visual pudo “ver” por primera vez a su bebé gracias a una escultura en 3D de su ecografía.
Tatiana Guerra, protagonista de esta historia, recibió en 2015 una impresión tridimensional del rostro de su hijo en gestación, como parte de una campaña de la marca Huggies en Brasil. La iniciativa buscó brindar a futuras madres ciegas la posibilidad de conectar de una forma única con su bebé antes del nacimiento.
El modelo incluía un mensaje en braille que decía: “Soy tu hijo”, generando una reacción llena de emoción que quedó grabada como uno de los momentos más conmovedores de la maternidad inclusiva.
Este gesto, que hoy sigue inspirando, demuestra que la tecnología también puede ser profundamente humana.