Washington, D.C., 7 de mayo de 2025 — Ovidio Guzmán López, alias “El Ratón” e hijo del exlíder del Cártel de Sinaloa Joaquín “El Chapo” Guzmán, ha alcanzado un acuerdo con la Fiscalía de Estados Unidos para declararse culpable de varios cargos relacionados con el n4rc0tráfico. La audiencia decisiva está programada para el próximo 9 de julio en una corte federal de Chicago.
El pacto, que podría incluir la cooperación de Guzmán como testigo protegido, representa un giro inesperado y estratégico en los esfuerzos del gobierno estadounidense por desmantelar una de las organizaciones crimin4l3s más poderosas y vi0l3ntas del planeta.
Documentos judiciales indican que los fiscales deberán presentar una copia del acuerdo ante la jueza Sharon Coleman al menos tres días antes de la audiencia. El procedimiento estaba originalmente previsto para el 12 de mayo, pero fue pospuesto tras avances sustanciales en las negociaciones entre ambas partes.
Ovidio Guzmán enfrenta múltiples acusaciones federales, entre ellas tráfico de dr0g4s a gran escala, lavado de dinero y posesión de 4rm4s de uso exclusivo del ejército. Su eventual colaboración podría proporcionar información crucial sobre las estructuras internas, rutas y alianzas del Cártel de Sinaloa, lo que convertiría su testimonio en uno de los más relevantes desde la captura de su padre.
El acuerdo se produce en un momento de creciente presión judicial sobre los cárteles mexicanos y sus líderes. En paralelo, se han intensificado los operativos de seguridad en Sinaloa, donde las autoridades temen un repunte de la vi0l3ncia como represalia por la posible delación de Guzmán López.
Expertos en seguridad coinciden en que la posible cooperación del hijo de “El Chapo” podría acelerar nuevas acusaciones contra figuras clave del n4rc0tráfico, tanto en México como en otros países de la región. Sin embargo, también advierten que esta decisión podría recrudecer la lucha por el control del cártel.
La expectativa por la audiencia del 9 de julio crece, no solo por el impacto jurídico del acuerdo, sino también por sus implicaciones geopolíticas y su posible repercusión en las relaciones bilaterales entre México y Estados Unidos en materia de seguridad y justicia.