El 1 de junio de 2025, México vivirá un evento sin precedentes en su sistema judicial con la realización de la Elección Extraordinaria de funcionarios judiciales, organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE). Este proceso, impulsado por la Reforma Judicial, permitirá a los ciudadanos elegir a nueve ministros, cinco magistrados del Tribunal de Disciplina Judicial, dos ministros de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), 15 magistrados de salas regionales, 820 jueces de distrito y magistrados de circuito, así como juzgadores en diversas entidades.
Los funcionarios que resulten electos rendirán protesta ante el Senado de la República el 1 de septiembre, para ser adscritos a los órganos correspondientes 14 días después. El INE, que ya ha establecido un cronograma riguroso, asegura que los consejos locales y distritales estarán conformados antes de noviembre y diciembre, respectivamente, sin participación de partidos políticos.
El proceso, que incluye un estricto calendario de actividades, prohibirá el financiamiento público y privado para los candidatos, otorgándoles únicamente acceso a tiempos en radio y televisión, además de la participación en debates. Los partidos políticos tampoco podrán promover ni criticar a los aspirantes.
El 1 de junio, los ciudadanos tendrán en sus manos seis boletas para elegir a los representantes judiciales, con un proceso que estará bajo la vigilancia de las autoridades correspondientes para evitar cualquier tipo de intervención ilícita o financiamiento ilegal.
Los resultados oficiales se publicarán a finales de agosto, y quienes resulten electos asumirán su cargo el 1 de septiembre de 2025, en un hecho que marcará un antes y un después en la historia del Poder Judicial mexicano.