Especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) aseguran que la aspirina y el omeprazol, dos medicamentos ampliamente consumidos a nivel mundial, pueden ocasionar serios riesgos para la salud si se utilizan en exceso.
El primero, siendo el principal antiinflamatorio no esteroide y el fármaco más popular, ofrece beneficios como analgésico y prevención de trombosis, pero su consumo excesivo conlleva peligros como irritación gástrica, erosión y sangrado intestinal, con una tasa de mortalidad del 13% cuando está vinculado a antiinflamatorios no esteroideos.
El doctor Omar F. Carrasco, del Departamento de Farmacología de la UNAM, destaca los riesgos de automedicarse con aspirina, aunque subraya su eficacia bajo supervisión médica.
El segundo, es un fármaco clave a nivel mundial, utilizado para controlar la secreción ácida y tratar el reflujo gastroesofágico, presenta efectos secundarios como diarrea, náuseas y lesiones gástricas premalignas, estudios recientes sugieren un aumento en la propensión al cáncer de estómago y daño renal crónico con su uso excesivo.
La doctora María Jiménez Martínez, coordinadora del posgrado de Farmacología Clínica de la UNAM, enfatiza que todos los medicamentos pueden tener reacciones adversas y deben usarse bajo indicación médica, con ajustes en la alimentación del paciente para garantizar su efectividad.