El Samsung Galaxy Ring, promocionado como un aliado para el bienestar y la salud de sus usuarios, enfrenta cuestionamientos tras un incidente que levantó alertas sobre su seguridad.
El creador de contenido tecnológico Daniel Rotar sufrió una hinchazón repentina en la batería del dispositivo mientras lo llevaba puesto, lo que impidió que pudiera retirarlo del dedo y le provocó dolor intenso.
El hecho ocurrió en un aeropuerto, antes de abordar un vuelo, y obligó a Rotar a recibir atención médica de emergencia.
El anillo fue finalmente retirado mediante lubricante médico y hielo, y aunque el usuario no presentó lesiones permanentes, el caso despertó preocupación internacional.
Samsung respondió señalando que se trata de un evento “extremadamente raro”, asegurando que la seguridad del usuario es su principal prioridad. La compañía investiga el caso y ha dado orientación sobre cómo proceder si un Galaxy Ring llegara a hincharse o quedar atascado.
Sin embargo, el problema no es aislado. Otros consumidores han reportado fallas en la batería, cuya autonomía se ha reducido drásticamente de varios días a apenas unas horas.
Algunos incluso recibieron reembolsos completos debido a la falta de repuestos disponibles. Factores como el calor, la humedad, el agua salada o defectos de fabricación podrían estar detrás de estas fallas.
El incidente ha reabierto el debate sobre la seguridad de los dispositivos portátiles, y expertos señalan la necesidad de que las empresas tecnológicas implementen medidas más estrictas para garantizar que herramientas diseñadas para mejorar la salud no terminen poniendo en riesgo la integridad de sus usuarios
