El Ayuntamiento de Tulum, encabezado por el regiomontano Diego Castañón Trejo, aprobó un nuevo endeudamiento de hasta 76 millones de pesos, recurso que será cubierto con los impuestos de los ciudadanos.
Durante la sesión de cabildo celebrada este día, se avaló el préstamo con un plazo de 12 meses, bajo el argumento de “ser un guardadito y usarlo cuando sea necesario”. Sin embargo, voces críticas advierten que esta decisión no resuelve los problemas de fondo y que los tulumnenses serán quienes paguen las consecuencias.
La medida se da en un contexto complicado para el noveno municipio, donde la inseguridad ha golpeado fuertemente la llegada de turistas, principal motor económico de la región. Ciudadanos nativos aseguran que esta crisis financiera es reflejo de una mala administración y de la falta de soluciones reales por parte del gobierno local.
Cabe destacar que tres regidores y el síndico municipal se ausentaron de la sesión, al no querer ser parte de lo que calificaron como “el principio del hundimiento de Tulum”.
Con este nuevo endeudamiento, la administración de Diego Castañón queda bajo la lupa, mientras la ciudadanía exige transparencia y un verdadero plan para recuperar la confianza y estabilidad en el destino turístico.