Tulum, Quintana Roo.— Más de 35 comerciantes y emprendedores de la comunidad de Chemuyil alzaron la voz este fin de semana para denunciar públicamente un presunto cobro irregular e injustificado por parte del delegado municipal, Gilmer Vidal Torres Cervantes, quien habría impuesto una cuota mensual de 300 pesos por turno de operación, sin sustento legal y sin brindar detalles sobre el destino de los recursos recaudados.
De acuerdo con los testimonios recabados, algunos de los cuales fueron proporcionados bajo condición de anonimato por temor a represalias, el delegado presentó el cobro como una “aportación voluntaria para mejoras en la comunidad”. Sin embargo, no existe comprobante oficial, recibos, ni documento alguno que respalde esta cuota.
“Dijo que era para mejorar el pueblo, pero las calles siguen igual de dañadas, la basura se acumula y no han puesto ni una lámpara nueva en el parque”, denunció un comerciante local.
Lo que ha encendido aún más el malestar entre los afectados es que el cobro se duplica para los negocios que operan en turnos diurnos y nocturnos, alcanzando hasta 600 pesos mensuales, situación que ha obligado a varios comerciantes, en especial vendedores de comida, a reducir horarios o subir precios para sobrevivir.
Sin respaldo legal ni transparencia
Los comerciantes aseguran que nunca antes se les había exigido este tipo de pago, y califican la medida como arbitraria, carente de base legal y con fines discrecionales. Hasta el momento, no se ha observado mejora alguna en los servicios públicos del poblado, lo que aumenta las sospechas sobre un uso personal de los fondos.
“No hay recibos, ni firmas, ni cuentas bancarias. Solo nos dicen que lo depositemos o lo entreguemos en efectivo. Esto parece más una cuota privada que un cobro del ayuntamiento”, expresó otra de las personas afectadas.
Exigen intervención municipal y estatal
Ante esta situación, los comerciantes ya comenzaron a organizarse para solicitar la intervención del Ayuntamiento de Tulum y del Gobierno del Estado de Quintana Roo, a fin de frenar lo que consideran un claro abuso de poder por parte del delegado.
Asimismo, no descartan la vía legal o la organización de protestas pacíficas si no obtienen respuesta a corto plazo. Su exigencia principal: transparencia, rendición de cuentas y la cancelación inmediata del cobro.
Hasta el cierre de esta edición, Gilmer Vidal Torres Cervantes no ha emitido ninguna declaración oficial respecto al origen, legalidad o destino de los recursos, lo que ha incrementado el descontento y la desconfianza en su gestión como autoridad auxiliar en Chemuyil.