TULUM, Q. Roo. — En un hecho que marca el inicio de una nueva era de disciplina en el transporte público de Tulum, la Unión Nacional de Transportistas del Cambio (UNTRAC) suspendió por seis meses a un operador que dio positivo a una prueba de alc0h0lím3tro sorpresa, convirtiéndose en el primer caso sancionado en lo que va de 2025.
La sanción fue impuesta como parte del nuevo protocolo interno de seguridad vial que entró en vigor este mes y que contempla la aplicación de pruebas aleatorias y sin previo aviso a los conductores afiliados. La unidad que tenía asignada el operador fue retirada de manera inmediata, en estricto apego al reglamento interno de la organización.
Julio César Estrella Martínez, secretario de Trabajo y Conflictos de UNTRAC, confirmó que estas medidas responden a observaciones recurrentes por parte de usuarios, quienes, aunque no interpusieron denuncias formales, reportaron de forma verbal a choferes con aliento alc0hól1co durante el servicio. “No vamos a esperar a que ocurra una tragedia. Las reglas están claras y se van a hacer cumplir”, declaró.
El operador sancionado no se encontraba transportando pasajeros en el momento de la prueba, pero sí portaba el uniforme oficial y tenía una unidad bajo su resguardo, lo que representa una falta grave conforme a las nuevas normas de conducta. “No se puede estar con aliento alc0hól1c0 mientras se porta el uniforme o se tiene una unidad asignada, sin importar si se está en servicio activo o no”, subrayó Estrella Martínez.
A partir de este mes, las pruebas de alc0holím3tro han quedado oficialmente integradas al reglamento de UNTRAC, y cualquier operador que resulte positivo será retirado de manera inmediata de circulación, sin excepciones.
Finalmente, la agrupación hizo un llamado a la ciudadanía para colaborar en la vigilancia de la calidad del servicio: “Invitamos a los usuarios a que nos envíen fotografías, videos o información clara si observan conductas indebidas. Estamos comprometidos con actuar en consecuencia”.
Con esta acción, UNTRAC busca elevar el estándar del transporte público en Tulum y enviar un mensaje claro de cero tolerancia a comportamientos que pongan en riesgo la seguridad de los pasajeros.
