Durante la conferencia mañanera de este viernes, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que el Gobierno Federal saldará, a lo largo del 2025, las deudas pendientes con proveedores de Pemex, las cuales ascienden a niveles históricos.
Sheinbaum afirmó que desde diciembre de 2024 ya se iniciaron los pagos a “algunos” proveedores y aseguró que en los próximos meses se cubrirá el total de los adeudos: “Se va a pagar a todos”, reiteró.
Una deuda en aumento
De acuerdo con Jesús Carrillo, director de economía del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), la deuda de Pemex con proveedores y contratistas alcanzó los 402 mil millones de pesos al cierre del tercer trimestre de 2024, lo que representa un incremento de casi cuatro veces en comparación con 2019, cuando el adeudo era de 125 mil millones.
Carrillo destacó que, además de la falta de precisión en el cálculo de la deuda, el incumplimiento de pagos ha impactado severamente la economía local en estados productores como Tabasco y Campeche, altamente dependientes de la actividad petrolera.
Otros retos para Pemex
Además de las deudas, Pemex enfrenta una serie de desafíos operativos, como la caída en la producción de hidrocarburos líquidos. En noviembre de 2024, la producción alcanzó solo 1.67 millones de barriles diarios, la cifra más baja desde 2020 y muy por debajo de las metas establecidas por el gobierno.
El impacto en los estados productores
El incumplimiento de pagos a proveedores no solo pone en jaque la operación de Pemex, sino que también afecta gravemente a las economías locales. Tabasco y Campeche, entidades con una fuerte dependencia de la industria petrolera, han experimentado una merma en la actividad económica debido a los retrasos en los pagos.
Con este compromiso, el gobierno de Sheinbaum busca dar un respiro tanto a los proveedores como a los estados afectados, enfrentando al mismo tiempo los retos económicos y operativos de la empresa estatal más importante del país.