La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha vuelto a declarar el mpox, anteriormente conocido como viruela del mono, como una emergencia de salud pública de alcance internacional. Esta alarmante decisión se tomó tras un brote severo en la República Democrática del Congo (RDC) que se ha extendido a otros países africanos como Uganda, Ruanda, Burundi y Kenia.
Es la segunda vez en dos años que la OMS considera al mpox como una amenaza sanitaria global, lo que subraya la gravedad de la situación. A diferencia del brote de 2022, que se concentró principalmente en hombres adultos y fue transmitido mayormente por vía sexual, el nuevo brote muestra un patrón de contagio más complejo, con variantes múltiples del virus y un aumento alarmante de casos en niños, quienes presentan una tasa de mortalidad elevada.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, enfatizó la necesidad de una respuesta internacional coordinada para contener el brote y salvar vidas, destacando que la rapidez con la que el virus se ha propagado en la RDC no tiene precedentes desde los años setenta.
Hasta la fecha, la OMS ha recibido informes de 14,000 casos y 524 muertes, aunque la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) estima que los casos podrían llegar a 17,000. Con la posibilidad de que el virus se extienda a otras regiones, el Comité de Emergencias de la OMS está preparando recomendaciones urgentes para frenar la propagación antes de que se convierta en una crisis mundial incontrolable.
Información/AristeguiNoticias