El mundo del cine y la comedia ha perdido a uno de sus rostros más emblemáticos. Ángel Salazar, reconocido por su papel como “Chi Chi” en la película de culto Scarface de 1983, fue encontrado sin vida el pasado fin de semana en Brooklyn, según confirmó su representante Ann Wingsong a TMZ. Con 68 años, el actor falleció mientras dormía en la casa de un amigo, quien descubrió su cuerpo el domingo por la mañana. Aunque no se ha determinado la causa oficial de su muerte, se sabe que Salazar sufría de problemas cardíacos, lo que ha llevado a especulaciones sobre un posible vínculo.
Salazar, nacido en 1956, alcanzó la fama interpretando al leal compañero de Tony Montana, personaje icónico encarnado por Al Pacino. Su carrera abarcó tanto cine como televisión, incluyendo participaciones en series como In Living Color y Last Comic Standing. Además, destacó en el ámbito del stand-up, dejando su huella con su característico estilo y la frase “chequea esto”. Su última actuación tuvo lugar a principios de agosto en Las Vegas.
La noticia de su fallecimiento ha generado una ola de tributos en redes sociales, con colegas como Tito Puente y Auggie Smith recordando su talento y calidez humana. Kadrolsha Ona Carole, quien trabajó con él durante años, expresó su profundo pesar: “Echaré de menos sus payasadas y su risa alegre. Te quiero, amigo mío. Que descanses en paz”.
Ángel Salazar deja un legado que perdurará en la memoria de quienes lo conocieron y de aquellos que disfrutaron de su arte, tanto en la gran pantalla como en el escenario.