Un hombre de Felipe Carrillo Puerto fue víctima de un robo, un amante de lo ajeno, se aprovecharon de su buena voluntad, llegó a su domicilio, le pidieron prestado su triciclo, él sin conocerlo y de buen corazón se los dio, pero jamás lo regresó .
La mañana de ayer, en un domicilio ubicado en la calle 55 x 64 y 66 de la colonia Juan Bautista, un individuo conocido por su generosidad fue engañado por un desconocido que se presentó como albañil.
El hombre, de corazón amable y dispuesto a ayudar, prestó su triciclo a este extraño sin dudarlo, confiando en su palabra de que se lo devolvería en breve. Sin embargo, el triciclo nunca regresó y el hombre sigue esperando en vano. La traición ha dejado una marca en su confianza, demostrando cómo a veces la buena voluntad puede ser aprovechada por quienes buscan su beneficio a expensas de otros.