Por redacción/ Última Nota
Un ciudadano carrilloportense denunció públicamente, una presunta irregularidad en el servicio del banco de sangre y en la falta de atención de su padre que lleva varios días sin que el tratamiento correspondiente.
Carta del lector ✉
Soy una persona que no siempre realiza este tipo de denuncias, sé que como persona debe imperar en mi la paciencia, pero esto ya rebasa todo tipo de paciencia con los trabajadores del hospital general del Felipe Carrillo Puerto.
Les invito a analizar el caso de mi papá que se encuentra hospitalizado en esta ciudad, si alguien se siente identificado con el caso los invito a denunciar y a etiquetar las personalidades competentes que me puedan ayudar.
El pasado viernes 24 de junio ingresamos a mi papá por complicaciones de una cirugía, el sufre de pie diabético como varios internos en el hospital.
Esa tarde nos dijeron que no había cirujano, pero nos atendió un doctor que procedió a internarlo para su intervención el lunes 27 de junio ya que su infección era de consideración y era avanzada.
Ese día al mediodía nos notificaron que se necesitaba dos unidades de sangre como mínimo para que mi padre pueda ser intervenido, sin embargo, por las horas de donación que maneja en el hospital no se pudo realizar este proceso. Ese día solicitamos la sangre para después reponerlo y se nos negó.
El día martes 28 llevamos nuestros donadores y sólo uno de tres pasó a la prueba para donación, de nueva cuenta se solicitó el préstamo de unidad de sangre al banco y se nos fue negado de nuevo, ese mismo día nos solicitaron dos unidades más de sangre llegando a ser cuatro unidades en total para la cirugía.
El día 29, qué fue sexto día, llevamos a tres donadores y sólo atendieron a uno de ellos (de muy mala gana porque solo debían atender a cuatro y mi donador era el número cinco) que porque uno de los médicos del banco de sangre no asistió a laborar, ese mismo día me percaté que la infección de mi papá seguía progresando de manera muy rápida solicitamos de nuevo la sangre y se nos fue negada de nueva cuenta.
Pedí platicar con el director del hospital quién me dijo ser el doctor Zúñiga y me reitero que la única manera para que le hicieran la cirugía a mi padre era donando las unidades de sangre solicitada, es decir, no me solucionó nada, quedamos en las mismas.
El día jueves 30 de junio lleve de nuevo a cuatro donadores, tres de ellos pasaron la prueba para donar y de nuevo postergaron la cirugía por falta de sangre en el hospital debido procedimiento que lleva la donación de sangre, (se lleva a la ciudad de Chetumal para su limpieza) y el hospital nos seguían negando la sangre prestada aún con los comprobantes de donación en mano, ya el día siete sin que sea atendido y la infección ya se hace notar más de lo normal, era para preocuparse.
El viernes primero de julio nos comentan que las unidades de sangre aún no llegan a Ciudad de Carrillo, sino que hasta en la noche, ya con este sería el día que se queda a mi papá en el hospital sin que se le atienda la infección que invade una de sus extremidades.
La noche de este viernes se le hizo primera transfusión de sangre, y el día sábado la segunda, quedando la tercera para como reserva para la cirugía, y domingo no hacen cirugía por falta de médicos los médicos especialistas.
Ayer lunes cuatro, se cumplió el día 11 en el hospital, la sorpresa que tampoco se le pudo hacer la cirugía por que la anestesióloga que no llegó a laborar (al menos eso nos informaron).
Hoy cinco de junio, el día 12 y de nuevo postergó la operación para mañana seis porque mi papá tiene anemia y le tiene que trasfundir sangre y sus unidades sangre en reserva desaparecieron (lo vendieron) y de nuevo no hay sangre en el banco de sangre.
Con estos actos considero que los del hospital están coludidos para amarrarnos de pies a cabeza aprovechando la desesperación de las familias que se encuentra en el mismo caso que la de nosotros.
Espero que esta información llegue a todos en especial a las personalidades que puedan evitar tantas anomalías que pasa en estos lugares con servidores públicos que se supone que están para proteger nuestro principal derecho natural que es la vida y juegan con ello como si fueran un juego de canicas.
Estas personas pisotean los derechos de pueblo, denigran las familias más pobres que son las más vulnerables ante las situaciones de salud, hagamos conciencia alcemos la voz y que la voz del pueblo sea escuchada de esta manera para ser tratados con respeto, así evitaremos estos médicos que se dicen ser protectores de la vida y que no jueguen con ello REPITO como si fuera un juego de canicas.