Por redacción/La Última Nota
57 negocios de FCP en el giro de bares y cantinas que permanecen cerrados por más de un año y medio a costa del Covid – 19, les resulta difícil volver abrir en el cambio a verde por dificultades económicas.
Yamil Tobías Caamal presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restauranteros y Alimentos condimentados (Canirac) en el municipio, informó que, luego del cambio en el semáforo epidemiológico estatal que les permite aún no pueden abrir, porque requieren empezar desde cero, dar mantenimiento, entre otras acciones.
Agregó que la Comisión Federal Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) que está cobrando al menos, mil 806 pesos de “reapertura”, a su vez tiene que invertir con los equipos preventivos como tapetes desinfectantes, termómetros, gel, por mencionar algunas, el cual se refleja en un golpe más.
Comentó que se reunirán con el representante de la Comisión en el municipio, para buscar el diálogo, llegar en acuerdos, condonaciones, descuentos y lo que se pueda, para que no lo sientan fuerte, no tengan que sobregirarse o hacer otros movimientos que los complique.
“No estamos en contra de las exigencias, pero si hacer el llamado a las autoridades a que nos ayuden en esta reapertura, den las facilidades y comprendan que estamos en un municipio con muchas dificultades, es muy difícil que podamos restablecernos rápido, por todo lo que nos dejó la pandemia”.
Añadió que a pesar de las problemáticas que tienen, prevén que está primera quincena de noviembre abran sus puertas cada uno de esos 57 establecimientos en todo el municipio.